Filicidio y algunos conceptos del pensamiento freudiano.Curso Completo de la Introducción al Pensamiento de Sigmund Freud.

Filicidio y algunos conceptos del pensamiento freudiano

Marina Luz Baigorria Acinas

Para comenzar a escribir este texto se desarrolla una breve historia reciente de un crimen de un niño de cinco años Lucio.

La situación intrafamiliar compleja situada en la provincia de La Pampa, el niño fue torturado, maltratado, abusado y violado por su madre y su pareja mujer. El padre posteriormente de la separación de su pareja – madre del niño- vive en otra provincia donde tiene su pareja y hace pocos días nació su hija. El problema principal fue la tenencia del niño entre la madre que “no podía sostener los gastos económicos para la crianza” y, por otro lado, la crianza de parte de la familia paterna. La jueza que en principio apoyo el cuidado y crianza del niño por parte de los abuelos, pero es la madre la que tiene que criarlo. Efectivamente por un mal desempeño de la jueza, el niño quedo en manos de su madre y su pareja y termino en un asesinato. No solo eso las instituciones operaron en ignorar la situación sumamente dolorosa de su tan poca vida del niño. Ni la escuela, ni hospital, ni vecinos denunciaron, ni policía, ineficaz poder judicial, no atendieron a la vida de Lucio. Se mediatizo el horroroso crimen que paso por las fronteras.

Por este motivo, voy a tomar unos conceptos estudiados en el Curso: pulsiones humanas, inconsciente, crimen, sexualidad, prohibiciones, malestar en la cultura y culpabilidad.

En la psique de la madre del niño y su pareja predominan las pulsiones de la muerte que impera la destrucción, la desintegración y la desilusión de lo vivo, pero también las pulsiones de la vida (Clase 3) de la madre por el hecho de la reproducción de su propio hijo, es una contradicción humana. La psique de lo biológico a lo social es una representación de la psique de lo que ha pasado, las huellas, la historia de la madre y de su pareja.

Freud dice: “cuando restauramos la concatenación correcta, llamamos “inconsciente” a la moción afectiva originaria, aunque su afecto nunca lo fue, pues solo de las expresiones “afecto inconsciente” y “sentimiento inconsciente” remite en general a los destinos del factor cuantitativo de la moción pulsional, que son consecuencia de la represión” (Freud, 1986, pág. 174). Es decir, el inconsciente es una instancia del pisque que engloba todos los procesos mentales conscientes e inconscientes que lleva a cabo estas personas -madre y pareja-, que está detrás de lo que hacen, dicen o desean. Como afirma Freud: “…una satisfacción pulsional es siempre placentera” (Freud, 1986, pág. 141). Como el maltrato, el abuso, la violación y golpes hasta la muerte del horroroso crimen del niño.

En la teoría freudiana, la sexualidad es la fuerza impulsora para el desarrollo de la personalidad, así como la causa primordial de las afecciones neuróticas, de las perturbaciones del carácter y de las inhibiciones funcionales debido a la lucha defensiva que el individuo también emprende en contra de ella.

La sexualidad es un concepto muy importante en Freud. ¿Por qué? Porque la pulsión sexual es la fuerza motivacional más importante. Él expresaba que esta fuerza no era solo la más prevalente para los adultos, sino también en los niños, e incluso en los infantes. En esta situación dos mujeres del mismo sexo utilizan al niño masculino indefenso abusado que por una parte de la cultura expresan que “odian al género masculino”, pero desde mi punto de vista, el crimen realizado a un niño de su propia madre y pareja no tiene nada que ver, pues el filicidio en la historia fue realizado por cualquier sexo no significa que el feminismo sea autor del semejante asesinato.

Como dice el Profesor Mizrahi: Freud toca la cuestión de las pulsiones violentas que deben ser reprimidas para que podamos gozar de los bienes de una cultura civilizada (Clase 3). “El superyó de la cultura (…) plantea severas exigencias ideales cuyo incumplimiento es castigado mediante una «angustia de la conciencia moral» “(Freud, 1986, pág. 137).

El superyó son las reglas de la cultura “es lo que hay que hacer” y “lo que no hay que hacer” (Clase 2). La cultura castiga, genera violencia y culpabiliza a las condenadas. La cultura dominante y hegemónica ciega de la realidad en la

vida de Lucio. Como así también las prohibiciones “de esto no se dice”, “no se habla” de los funcionarios y funcionarias de las instituciones involucradas que también son consecuencias del crimen del niño.

Fue una conmoción social y cultural en las calles pampeanas mientras se lee el veredicto del juicio, voces manifiestan: “investigación y cárcel para todas y todos los que intervinieron en el caso de Lucio. No solo la jueza nefasta.

¿Quién hizo el informe que le llego a la jueza? ¿Niñez que hizo? ¿Medicas, médicos, maestras y maestros que hicieron? Nadie habla de esos personajes oscuros que miraron con la nuca”.

Considerando estas situaciones, se puede enunciar que gran parte de la culpa por nuestra miseria la tiene lo que se llama nuestra cultura; seríamos mucho más felices si la resignáramos y volviéramos a encontrarnos en condiciones primitivas. Esta aseveración es asombrosa, porque como quiera que se defina el concepto de cultura, es indudable que todo aquello con lo cual intentamos protegernos de la amenaza que acecha desde las fuentes del sufrimiento, pertenece justamente a esa misma cultura. Esta es la preocupación de Freud el malestar en la cultura, es el antagonismo existente entre las necesidades pulsionales del ser humano y las restricciones que la cultura les impone.

Se finaliza en este texto, la madre y su pareja son declaradas culpables del asesinato. Es importante revisar la responsabilidad social de este terrible crimen, desde el Estado y desde los entornos en los que Lucio circulaba -circulo intrafamiliar e instituciones-, para comenzar a pensar una salida colectiva en el cuidado de las infancias.

Bibliografía

-Profesor Mizrahi, G. Clases 2 y 3. Enero - Febrero 2023.

-Freud, S. (1986). Sigmund Freud Obras completas v. 14. En Contribución a la historia del movimiento psicoanalítico. (págs. 1-290). Avellaneda, Pcia. de Bs. As: Amorrortu.

-Freud, S. (1986). Sigmund Freud Obras completas v.21. En Malestar en la cultura (págs. 1-290). Avellaneda, Pcia. de Bs. As: Amorrortu.